En esta ruta de Historia de Madrid, vamos hablar de los principales acontecimientos de la ciudad de Madrid, desde los orígenes hasta la actualidad.
Veremos cómo la ciudad ha ido cambiando hasta convertirse en la gran urbe del siglo XXI que tenemos.
Antes de hablar de los inicios de Madrid, hay que contar que todo surgió muy cercano al río Manzanares.
Desde el 300.000 a.C. está documentado algunos restos que nos hablan de la presencia del ser humano.
Antes había animales por esa zona, grandes animales.
Mucho tiempo después se habla de que había villas romanas, villas alrededor de lo que sería la actual ciudad de Madrid, pero no podemos hablar ni siquiera de un pueblo.
Tendríamos que irnos hasta tiempos de los árabes para encontrar la fundación de la ciudad de Madrid.
1ª Parada: Fundación de Madrid
Si hablamos de grandes acontecimientos de la ciudad de Madrid, tenemos que empezar por su fundación.
Para ello nos hemos venido hasta la Cuesta Ramón junto al Parque del Emir Mohamed I. Aquí vamos a empezar nuestra Ruta por la Historia de Madrid.
Mucho se ha escrito a lo largo de la historia de los inicios de Madrid. Hay historias legendarias, hay autores históricos que defienden un pasado romano e incluso algunos hablan de asentamientos carpetanos o asentamientos visigodos. En realidad, a pesar de que hay algunos restos, son restos más bien a las afueras de Madrid o restos muy menores.
Con lo cual tenemos que empezar a nivel histórico con lo que sabemos cien por cien a día de hoy. Y es que hoy en día se dice que la fundación de Madrid ocurrió alrededor del año 865, esto sí está documentado.
En el contexto histórico nos encontramos en el emirato de Córdoba.
Este reinado comenzó con la llegada de Abderramán I a la Península Ibérica a mediados del siglo VIII. El Emmir Muhammad I reinó sobre este amplio territorio allá por el siglo IX. A mediados del siglo IX, la Península Ibérica estaba dividida. Por un lado estaba el emirato de Córdoba, pero los reinos cristianos venían presionando desde el norte intentando conquistar más territorio.
Madrid se encontraría en la zona que se llama la marca media, muy cerca de la frontera entre cristianos y árabes. En el emirato se estaban llevando a cabo sublevaciones, muchas en la ciudad de Toledo.
Mayrit, nombre con el que nace la ciudad de Madrid, era un enclave defensivo, no se funda como pueblo o ciudad, sino que se funda como una fortaleza.
Su función es defender por si atacaban los cristianos, defenderse por si hay alguna sublevación en Toledo poder contraatacar, y ser un lugar del que poder salir a la ofensiva, hacer campaña militares.
Los restos de los primeros tiempos de Madrid son muy pocos y todos los que hay son defensivos.
Muralla
El más importante es la muralla musulmana, justo donde nos encontramos.
Esta muralla fue construida a finales del siglo IX, principalmente en sílex con toques de piedra caliza y algo de argamasa.
También se han encontrado otros restos menores.
Otro gran lienzo de muralla se ha hallado en el Museo de las colecciones reales.
Y cercano a la calle mayor y la plaza de oriente se han encontrado algún resto menor de alguna atalaya, o alguna base, pero siempre de carácter defensivo.
Se supone que este enclave defensivo fue lo que hizo que poco a poco llegara población y se fuera acomodando a las afueras de esta fortificación. Esto es lo que daría lugar a la primera población del primer Mayrit.
Así que aquí comienza la historia de la ciudad de Madrid.
2ª Parada: Conquista cristiana de Madrid
La segunda parada de la ruta Historia de Madrid la vamos a hacer en las Escalinatas del Fotógrafo Alfonso, junto a la Calle Segovia.
La calle Segovia antiguamente no era una calle, sino que era el Arroyo de San Pedro. Este arroyo dividía dos zonas: las Vistillas y la colina donde está el Palacio Real y la Almudena. Este arroyo ha dividido durante mucho tiempo a cristianos y a musulmanes en la ciudad de Madrid.
Mayrit
Tras la fundación musulmana, hubo un dominio musulmán durante aproximadamente 200 años. Y los cristianos eran obligados a vivir al otro lado del arroyo de San Pedro, donde estarían actualmente las Vistillas. Durante estos 200 años de dominio musulmán, la ciudad cambió de manos en varias ocasiones.
Los reyes cristianos del norte, hacían ataques sobre la ciudad de Madrid, razias. Las razias eran un ataque rápido sobre una ciudad que pertenecía al enemigo, la conquistaban, la destrozaban lo más que podían y se llevaban todas las riquezas. Pero no tenían la fuerza para controlarla o dominarla, y por eso la abandonaban.
Madrid cristiano
Esto sucedió así hasta el año 1085, 1087,1089, 1090 no se sabe con certeza la fecha, hay quien piensa que pudo ser en el año 1083. Se sabe que en el año 1090 ya pertenece al rey Alfonso VI.
No se sabe con certeza cómo fue la conquista de Madrid por las tropas cristianas. En las fuentes no se habla nada de ello, ni en las fuentes musulmanas ni en las fuentes cristianas, ni unos que la pierden ni otros que la conquistan.
Lo único que sabemos es que en el 1090 aparece un documento en el cual se dice que todas las ciudades que están alrededor de Toledo, y que pertenecieron a la marca de Toledo, que esta zona dominada por los musulmanes en el centro de la península, pasan a formar parte del territorio ya Cristiano con Alfonso VI como rey.
Se puede deducir que la conquista fue bastante sencilla, y que no tuvo que hacerse un gran esfuerzo bélico. Algunas fuentes hablan de que el rey Alfonso VI reunió a sus mesnadas a las afueras de la ciudad y que luego se hizo un ataque bastante importante.
Hay una leyenda que nos habla de unos segovianos que son los que hacen la conquista trepando por las murallas para abrir la puerta de forma fácil. Esto se cuenta varios siglos después de esta conquista, cuando lo que se intenta es engrandecer la ciudad de Madrid y por eso se inventa esta leyenda.
Lo más probable es que surgiera un acuerdo entre el gobernador de la taifa de Toledo y el rey Alfonso VI, y se entregara la ciudad.
En el día a día de la gente, cambió poco el que ahora estuviese en manos cristiana. La convivencia entre las distintas religiones la podemos ver en la ruta del Madrid de las tres culturas.
Aumento de población
El interior de la ciudad quedó para los cristianos, y a los musulmanes los mandaron al otro lado, a la zona de Las Vistillas (que comenzó a llamarse la Morería).
Vino muchísima población cristiana a la ciudad. Cristianos que venían desde el norte, desde los territorios cristianos y cristianos que venían desde el sur, de territorios dominados por musulmanes.
Con lo cual, la población de la ciudad de Madrid crece de una forma exponencial y crece con un sentido claramente cristiano.
Se empezarán a construir las primeras iglesias, se empezarán a hacer las primeras reformas de la ciudad, se empezarán a realizar también las primeras murallas y todo poco a poco irá dando forma a una ciudad propiamente cristiana.
Y en la ruta por la Historia de Madrid, entramos en el Madrid de tiempos medievales.
3ª Parada: Fuero de Madrid
La siguiente parada de la ruta Historia de Madrid la hacemos en la Plazuela de Santiago.
El Fuero de 1202, llamado también el Fuero Viejo, es el documento más importante de la historia de Madrid. Es el documento de importancia legal y jurídica más antiguo que se conserva, y se conserva en un estado bastante bueno.
El Fuero es redactado por el propio concejo de Madrid, supuestamente con permiso del Rey (en aquel momento Alfonso VIII) aunque oficialmente no está ratificado por el rey.
En 1202 ya llevamos más de cien años de dominio cristiano y esto se hace notar en el documento.
Este documento establece las normas que se regían en la ciudad de Madrid.
Da información de los lugares que había construido. Aparecen diez iglesias -llamadas como iglesias del fuero- y que además servían como centros administrativos y jurídicos.
En el fuero de Madrid hay muchos temas legales, como las penas que se debían imponer por los diferentes delitos.
Divisiones sociales
También nos habla este fuero de las divisiones sociales.
En un primer escalón están los vecinos o hijos de vecinos (gente que había nacido en Madrid y que vivía en Madrid al menos dos tercios del año), que van a tener las mayores ventajas fiscales y jurídicas.
Los herederos (personajes que habían heredado alguna propiedad en la ciudad de Madrid sin embargo no vivían aquí, sino que venían de vez en cuando) estarían en el segundo escalón.
En un tercer escalafón estarían los aldeanos o trabajadores que se habían establecido aquí en Madrid.
Por último los forasteros.
Si un vecino de Madrid cometía un asesinato, la pena era 100 maravedies o si no podía pagarlos, se le cortaba una mano.
Cuando el que había cometido el asesinato era un forastero, lo tenía que pagar con su vida: era ahorcado.
Si éramos vecinos o hijos de vecinos de Madrid no deberíamos pagar ningún tipo de impuesto en la ciudad.
Todo el resto del sociedad, evidentemente también judíos y musulmanes, tenían numerosas tasas ya sea de comercio, de salida y entrada de la ciudad etcétera.
Mercado
El documento también nos habla de que en el mercado se vendía principalmente carne de oveja y carne de cabra, y nos habla de los diferentes productos agrícolas y algunos ganaderos incluso que se vendían.
Chito
En la ruta de Historia de Madrid no podíamos dejar de hablar de El Chito.
El Fuero legisló un juego al que jugaban en Madrid, el chito, juego que conllevaba tanta disputas que hubo que legislarlo.
Este juego consistía en lanzar una pieza de madera (o hierro) sobre un cilindro que tenía varias monedas encima.
Según quedaran las monedas más cerca del cilindro o más cerca de las pieza, el dinero iba para uno o para otro.
Documento
El documento del Fuero consta de cuatro cuartillas (aunque una se ha perdido), cada cuartilla tiene ocho hojas, y además dos hojas que se añadieron posteriormente.
El Fuero estuvo vigente desde 1202 hasta 1348, en que se empezaron a aplicar una reglamentación basada en el Antiguo Régimen, y que está recogida en las ordenaciones de Alcalá, promovidas en su día por el rey Alfonso XI.
4ª Parada: Madrid, Capital de las Españas
En la Plaza de la Villa se encuentra gran parte de la historia de Madrid, y no podíamos dejarla atrás en nuestra ruta de Historia de Madrid.
En esta Plaza de la Villa se encontraba el Ayuntamiento de Madrid hasta que se trasladó al Palacio de Cibeles.
Anterior a éste, hubo otro Ayuntamiento, justo al otro lado de la calle Mayor, donde estaría la antigua iglesia de San Salvador (o del Salvador). En esta iglesia (en la parte alta, en su coro) es donde se celebraban las reuniones del Concejo de Madrid, las reuniones de lo que era Ayuntamiento de Madrid.
La ciudad de Madrid fue creciendo en importancia gracias a los nobles y a una serie de familias que son los que se reunían en el concejo, y son los que van haciendo las normativas. Pero en el año 1560, Madrid no era una ciudad importante.
Cuando en el año 1561 Felipe II la convierte en la capital, fue lo que le dio un gran crecimiento a la ciudad.
Antes de que Felipe II instaurara la capital permanente en Madrid, no había capital del reino, la capital estaba donde estaban los reyes.
En tiempos de Carlos I, padre de Felipe II se colocó la capital de forma casi permanente en Toledo, la ciudad imperial donde él pasaba más tiempo, aunque se pasó su vida viajando y casi sin estabilidad. Carlos I le dio un consejo a Felipe II, que pusiera la capital de forma permanente en un mismo lugar.
Capital por descarte
Felipe II decide ponerla en Madrid prácticamente por descarte.
Valladolid, Segovia o Burgos eran ciudades que habían hecho la revuelta de los comuneros contra Carlos I, en las cuales había una población de nobles bastante importante, y eran bastante belicosos con respecto al rey, y por eso iba a haber una oposición ahí.
En Toledo estaba el Arzobispo, un poder de la Iglesia que era importantísimo y que por tanto iba a producir un contrapoder al respecto del rey.
Otras ciudades como Valencia, Barcelona o Sevilla eran muy importantes comercialmente y en cuanto a población pero estaban en los exteriores del reino, no estaban en el centro.
Se elige Madrid por la centralidad, porque no tiene una representación muy importante de nobles que estén en contra del rey y por la cercanía a San Lorenzo del Escorial.
Además Madrid se encuentra a la misma distancia de Toledo que de Segovia, las dos posesiones más importantes del reino.
Hay quien dice que se elige Madrid porque tiene aires muy puros, muy limpios.
Otros dicen que Isabel de Valois (esposa de Felipe II) tiene mucho que ver, que a ella le gustaba Madrid e influye sobre el rey para que tomara esta decisión.
La principal razón es que Madrid era una ciudad por crear, y el rey la podía hacer a su imagen y semejanza.
En el año 1601 la capital se traslada a Valladolid, y en el año 1606 vuelve nuevamente a Madrid.
Al convertirse en capital, la población se duplica en un año: pasó de tener unos 30.000 habitantes a tener más de 60.000.
Esto se debe a que no solo viene el rey, sino que viene la familia real, los servidores de la familia real, los nobles que quieren hacer la pelota a la familia real, los servidores de estos nobles, maestres, comerciantes…
Que Madrid sea la capital de España es un condicionante claro para el crecimiento y la importancia de la ciudad.
5ª Parada: Construcción de la Plaza Mayor y la Cerca de Felipe IV
En la Plaza Mayor de Madrid vamos a hacer la siguiente parada de nuestra ruta por la Historia de Madrid.
A lo largo del siglo XVII en Madrid se van a construir muchas de las plazas, calles y lugares que conocemos hoy en día.
Plaza Mayor
Antes del siglo XVII ya se venía utilizando la llamada Plaza de la Rabal.
Sin embargo, la plaza mayor construida como tal, se va a inaugurar en 1619. Juan Gómez de Mora va a ser el arquitecto.
Esta plaza se va a conformar como un lugar principal para eventos, y por ello se va a convertir en una de las zonas más importantes de la ciudad.
La festividad que más ha conformado la identidad de los madrileños ocurrió en 1622 con la canonización de San Isidro. Esta canonización de San Isidro va a ser muy importante porque es un santo nacido en Madrid y va a ser muy importante para la sociedad.
Se celebran grandes festejos tremendos por todo Madrid, pero sobre todo en la Plaza Mayor.
Cerca de Felipe IV
En 1625 se comienza a construir la cerca de Felipe IV.
Esta cerca no era una muralla defensiva, sino que era un muro para controlar la entrada y salida de personas y cobrar impuestos.
Este muro lo que hizo fue que la ciudad de Madrid no pudiera expandirse más de esa cerca, excepto algunas excepciones contadas.
Cuando se derriba en 1868 se conforman gran parte de las avenidas que hoy tenemos en Madrid: las Rondas de Segovia o Toledo, las calles Génova, Sagasta o Carranza.
Palacio del Buen Retiro
Un último hecho que hay que comentar del siglo XVII en Madrid, es la conformación de lo que sería el Palacio del Buen Retiro.
Que ha dado lugar al parque popular más madrileño y más conocido, el Parque de El Retiro.
Fue una construcción de los reyes y para los reyes pero con el tiempo se abrió a toda la población, y hoy en día es una de las zonas más agradables de la ciudad.
6ª Parada: Entrada de Carlos III a Madrid
La siguiente parada de nuestra ruta Historia de Madrid la vamos hacer en la Puerta de Alcalá.
Por la puerta de Alcalá es por donde hizo su entrada oficial a la ciudad de Madrid el rey Carlos III.
Carlos III entró en Madrid en diciembre de 1759.
Estaba en Nápoles cuando recibió la noticia de que su hermano Fernando VI había muerto sin descendencia y le correspondía el trono de España. Salió de Nápoles, y llegó a Barcelona donde fue recibido olor de multitudes, de ahí continuó hacia Zaragoza donde fue recibido de la misma manera. También Alcalá de Henares tuvo un gran recibimiento. Entra en la ciudad de Madrid en diciembre de 1759, pero sin grandes festejos.
Él entró por la Puerta de Alcalá, pero no la que tenemos actualmente, una primigenia, más antigua y menos artística. Como esta entrada a la ciudad era poco para él, decidió hacer su entrada oficial con celebraciones en julio de 1760. Se montó una gran fiesta.
Saliendo desde El Retiro tomaron camino hacia la calle de Alcalá, Puerta del Sol, Plaza Mayor y nuevamente hacia El Retiro.
Se hicieron unas decoraciones totalmente ficticias. Arcos, tapices, y otra serie de arquitecturas provisionales.
Fue Ventura Rodríguez el que organizó todo este tipo de festejos y todas estas construcciones.
En la Plaza Mayor hubo fuegos artificiales, bailes y corridas de toros.
Cambios en la ciudad
Si fue importante el recibimiento, más importante fue la labor de Carlos III en la ciudad de Madrid.
Era el rey, pero se habla que fue el mejor alcalde de la ciudad de Madrid.
Se volcó en que su capital fuera una ciudad importante y una ciudad bien construida.
Construyó la Puerta de Alcalá; construyó el Hospital Carlos III (donde tenemos actualmente el Museo Reina Sofía); trajo el jardín botánico de la quinta de migas calientes a donde se ubica actualmente; inició la construcción del Museo del Prado (que iba a ser gabinete de ciencias naturales); también las Caballerizas Reales; también el Ministerio de Hacienda (Casa de la Aduana en aquel momento); y un montón de construcciones importantísimas en toda la ciudad.
Además se hicieron ordenanzas de limpieza de la ciudad; se iluminaron las calles.
Todo el decoro para convertir la ciudad de Madrid en una ciudad al estilo europeo.
Carlos III había vivido en Italia y había viajado muchísimo por Europa, y quería que Madrid se convirtiera en una ciudad mucho más bonita y mejor construida de lo que era cuando él llegó.
El cambio que realizó Carlos III en la ciudad es reseñable.
7ª Parada: Llegada del Canal de Isabel II a Madrid
La Fuente de los Galápagos en la Plaza de Nicaragua (dentro del Parque de El Retiro) fue construida en honor a Isabel II.
Otro de los hitos de la ciudad de Madrid, y que no podemos dejar fuera de nuestra ruta por la Historia de Madrid, fue la construcción del Canal de Isabel II.
En 1850 la población de Madrid estaba al entorno de 250.000 personas que se abastecían de agua a través de los viajes de agua.
Para mediados del siglo XIX existían en Madrid alrededor de 124 km de viajes de agua subterránea, pero aún así no era suficiente y estaba haciendo estragos el problema con el agua.
Se calcula que en este momento había siete litros al día por persona, pero esto no contaba con los sistemas de regadío y el suministro de las fuentes.
Se había conformado como muy importante la profesión de aguador, que eran estas personas que llevaban vasijas de 10 l de agua solo a las casas que se lo pudieran permitir.
Aunque se venía hablando desde hacía tiempo del proyecto del Canal de Isabel II, finalmente se firma el comienzo en 1851.
Juan Bravo Murillo el que firma el Real Decreto y a partir de ahí se comienza el proyecto.
La primera fase de este proyecto consistió en la creación de un embalse del que tomar agua del río Lozoya y crear un canal de 70 km que transportara el agua hacia la ciudad de Madrid.
En 1858 se inaugura este primer tramo en la antigua calle Ancha de San Bernardo, con la fuente que hoy en día tenemos a la entrada de la Casa de Campo.
En la década de 1860 se construyó la presa El Pontón de la Oliva, que fue considerada en su día, la obra hidráulica más importante de toda Europa.
Y poco a poco se fue ampliando el servicio para que llegara a todos los madrileños.
Plan Castro
El Canal de Isabel II fue fundamental porque si no la ciudad no podría haber crecido tanto. El suministro del Canal de Isabel II sirvió para acelerar el proyecto del Ensanche de Madrid que pocos años después comenzó.
En 1860 es cuando se inaugura el Plan Castro, el nombre viene del urbanista Carlos María de Castro que fue quien lo organizó.
Para ello se basó en el plan Haussmann que se había puesto en marcha años antes en París.
Crea en una superficie principalmente al norte y al este de la ciudad de Madrid más de 2.000 hectáreas de terreno para construcción de viviendas, plazas y de zonas de paso.
Tardaría mucho en llevarse a cabo, porque primero hubo que derribar las cercas.
Al derribar la cerca de Felipe IV permitió ampliar la ciudad y la creación de una serie de avenidas.
Y poco a poco se fueron creando lugares como el barrio de Argüelles o el distrito de Salamanca.
8ª Parada: Construcción de la Gran Vía
Si estamos hablando de transformaciones de la ciudad de Madrid, la mayor transformación fue la que implicó derribar cientos de calles, eliminar el trazado de muchas otras, derribar cientos de casas, eliminar conducciones de electricidad… y todo ello para el avance beneficioso para la ciudad. Todo esto fue lo que implicó la construcción de la Gran Vía.
Se tuvo que eliminar una grandísima parte de la ciudad y modificar completamente el trazado de muchas de sus vías para poder hacer una avenida en pleno centro de la ciudad.
El motivo era conectar los dos barrios burgueses por antonomasia en 1860, el barrio Salamanca y el barrio de Argüelles. El proyecto inicial era unir la Puerta del Sol con la Plaza España (Plaza de San Marcial en aquel momento).
Se quiso hacer una primera conexión entrando a través de la Plaza de Callao, y lo único que se realizó de esa obra fue la Plaza de Callao, que se inaugura en 1866.
Hubo un segundo proyecto que conectaba la Puerta del Sol a la Plaza de San Marcial, bajando por la calle Leganitos. Este segundo proyecto tampoco se realizó por el desnivel que tiene la calle Leganitos.
Proyecto definitivo
En 1880 se hace el proyecto que iba a ser definitivo.
Se empieza a dar muchísima publicidad, tanto que terminó creándose una zarzuela, la Zarzuela de la Gran Vía.
Se aplazó un tiempo pero se retoma la construcción en 1898.
Iría desde la Calle Alcalá hasta la actual Plaza de España, y sí sería la conexión entre los dos barrios burgueses.
Hubo una primera propuesta para que alguien se hiciera cargo de las obras que no se realizó, y así con una segunda y una tercera. Finalmente Martin Albert Silver es el que tomó el proyecto.
Se dijo que se construiría en tan solo 8 años. Se inició en 1910 pero no se terminó hasta 1960.
Primero había que derribar, luego poner las infraestructuras ,y luego ir construyendo cada uno de los edificios.
Cada edificio fue entregado a un arquitecto diferente y con propuestas completamente diferentes.
Tres tramos
Se realizó en tres tramos.
El primer tramo iría desde la embocadura con la calle de Alcalá hasta llegar a la desembocadura con la calle Montera, la Red de San Luis.
El segundo tramo iría desde la Rede de San Luis hasta la Plaza de Callao.
El tercer tramo desde la Plaza de Callao hasta lo que es la Plaza de España actualmente.
Se iniciaron las obras en 1910 y se fueron haciendo cada uno de los tramos por diferentes épocas.
La primera parte de esta calle tiene un sentido mucho más clásico, mucho más sobrio y mucho más decimonónico.
El segundo tramo y sobre todo el tercer tramo tienen estilos mucho más modernos.
Iba a tener un bulevar en su centro, que se eliminó para meter más carriles para el tráfico.
La calle Gran Vía se convirtió en la principal arteria de la ciudad. La calle más popular, más divertida, con más tabernas, con más bares, con más cines, con más teatros, con más salas de variedades. Se le llamó incluso el Broadway madrileño por todos los espectáculos que se podían encontrar.
Actualmente sigue en funcionamiento y sigue teniendo tanta importancia como en su momento cuando se construyó, y es vía de acceso entre estos dos barrios burgueses que hemos mencionado.
9ª Parada: Inauguración del Metro de Madrid
Desde hace muchos siglos la situación del tráfico siempre ha sido muy complicada en Madrid.
El primer transporte público fue el tranvía. El tranvía madrileño se inauguró en 1871 y las primeras líneas estaban tiradas por caballos, y a finales de siglo se adaptó a la electricidad.
Pero siempre hubo problemas con el tráfico por la superficie, y poco a poco fue eliminado el tranvía.
Se empezó a pensar en crear una red de Metro.
Este proyecto de la red de Metro fue visto por muchos como algo para lo que la ciudad no estaba preparada, decían que era una locura comenzar a hacer el metro. Pero aún así el proyecto salió adelante.
El arquitecto principal del proyecto de la compañía Metropolitana Alfonso XIII (que era su nombre inicial) era Antonio Palacios.
También había varios ingenieros trabajando en el proyecto, entre ellos Miguel Otamendi.
En 1917 comienzan las obras y solamente dos años después, en 1919, se inaugura el primer tramo. Este primer tramo sería la parte de la Línea 1 desde Sol a Cuatro Caminos.
Al principio eran simplemente seis estaciones, aunque rápido se fue viendo que era un transporte muy adecuado para la ciudad y se fue ampliando.
En la década de los 20 ya se conformó la línea 2 y se comenzó a conformar la 3.
Y poco a poco se fueron realizando el resto de las líneas de Metro.
Hoy en día hay en Madrid una de las redes de Metro más importantes de todo el mundo, con unos 320 km de vías.